El Viejo y el Mar
Basado en el libro de Ernest Hemingway y homenaje al autor,
ganó el Oscar el mejor corto de animación. Esta película
llevó muchos años de trabajo, y consta de alrededor de 29.000 cuadros pintados sobre vidrio. Utiliza una técnica única: pintura al óleo sobre planchas de cristal. Esta técnica, detallista y laboriosa; logra que cada frame del corto sea una obra de arte.
El estilo de Aleksandr Petrov es lo que le hace singular por encima de sus historias, calificadas en ocasiones de "realismo romántico", por su forma imaginativa de representar sus paisajes, los personajes humanos y animales. Utiliza como técnica en muchos casos sus propios dedos en vez de los tradicionales pinceles y ubica sus diseños al óleo sobre un soporte de cristal.
Se trata de un corto animado de unos 20 minutos que brilla por su belleza y trabajo.
Este corto es una coproducción con Canadá, que es el país creador de este gigantesco formato (70mm en horizontal).
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