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martes, 7 de enero de 2014

JEAN VIGO: EL POETA ÁCRATA DEL CINE FRANCÉS.



JEAN VIGO: EL POETA ÁCRATA  DEL CINE FRANCÉS.





Aún recuerdo con gusto aquellas tardes de historia del cine impartidas por aquel profesor tan entrañable llamado Enric Ros, pero sobre todo recuerdo con especial nitidez el día que me hablo de un mediometraje llamado Zéro de conduite del director Jean Vigo. Para mi fue todo un descubrimiento que me sumergiría en la escueta pero a la vez intensa filmografía de este director que a posteriori  se convirtió en estandarte reivindicado por la nouvelle vage.
Cuantas veces soñé que lo que ocurre en dicho film ocurriese también en aquel colegio en cual estuve interno en mi temprana adolescencia...
Pero basta de entrar en el terreno personal y leamos lo que dice "Weblogía" de Jean Vigo:


Jean Vigo (París, 26 de abril de 1905 - París, 5 de octubre de 1934) fue un director de cine francés. Un poeta del cine. Su carrera como director fue una de las más breves de la historia. Sólo cuatro películas, cuyo tiempo total no sobrepasa los 200 minutos, constituyen su obra completa. Pero la importancia del cine de Jean Vigo ha sobrepasado la indiferencia inicial, convirtiendo a su creador en uno de los directores más influyentes del siglo XX. Se le conoce sobre todo por dos películas que tuvieron una gran influencia en el desarrollo posterior del cine francés: Cero en conducta (1933) y L'Atalante(1934).
Era hijo del militante anarquista español Eugène-Bonaventure de Vigo, de origen ítalo-francés, conocido con el sobrenombre de Miguel Almereyda (anagrama de "y a de la merde"), director del periódico Le Bonnet Rouge. Su padre fue arrestado y encerrado en la prisión de Fresnes, donde, en 1917, fue hallado muerto, estrangulado con los cordones de sus propios zapatos. A causa de la reputación de su padre, Jean debió adoptar un nombre supuesto, Jean Sales. Entre 1918 y 1922 fue alumno en un internado de Millau, experiencia en la que se basó para rodar su película Cero en conducta.


Su primera película, el mediometraje mudo À propos de Nice (1930),  financiada por su mujer, Elisabeth Lozinska, con quien se había casado tras terminar sus estudios universitarios Una sátira social que aprovecha el tema de un verano en la Costa Azul francesa para establecer sus intereses argumentales y artísticos: por un lado, las diferencias de clase; por otro, la innovación experimental.


                                                

                                            Los cinco primeros minutos ....




 Es una especie de ensayo fílmico de tono satírico que explora las desigualdades sociales de la Niza de los años 20, lanzando una feroz diatriba contra los veraneantes burgueses. En el filme colaboró con él el director de fotografía ruso Boris Kaufman (hermano del director Dziga Vertov), quien intervendría después en todas las obras de Vigo.Con frecuencia Vigo llevaba a Kaufman a pasear en silla de ruedas con una cámara entre las piernas y tapada por una manta (la silla de ruedas pasaba desapercibida en una ciudad como Niza). Así eran capaces de filmar a las personas sin que se diesen cuenta, que era lo que ambos buscaban porque eran partidarios de la teoría kino-pravda (cine-verdad).


En 1930, Vigo crea en Niza un cine-club llamado "Les Amis du Cinéma", donde programa, entre otras muchas, películas soviéticas. 

Su siguiente filme, de encargo, fue Taris, roi de l'eau (1931), un documental sobre el campeón de natación Jean Taris, destacable sobre todo por las tomas submarinas.



Cero en conducta (Zéro de conduite) es una obra mucho más personal. Rodado con bajo presupuesto, es un mediometraje de 45 minutos que narra la insurrección de los estudiantes de un internado contra sus estrictos profesores. Gran parte del argumento deCero en conducta se basa en los recuerdos de Vigo, que pasó gran parte de su infancia en internados. En sus escasos 44 minutos Cero en conducta es un compendio de recursos que subvierten el orden perceptivo. Desde la famosa secuencia de la guerra de almohadas en la que el uso de la cámara lenta, la iluminación expresiva y la música en reversa contribuyen a la construcción de una atmósfera onírica- hasta el uso de dibujos animados y gags tomados del recién desaparecido cine mudo, el filme sorprende por la frescura con que estos recursos son manejados por Vigo, quien los hace parecer como si fuese la primera vez que se utilizan en la pantalla. Gran parte del argumento de Cero en conductase basa en los recuerdos de infancia de Vigo. Tras la muerte de su padre, el pequeño Jean estuvointernado durante cuatro años en un colegio de N√≠¬Æmes. La severidad tradicional del sistema escolar francés dejó una huella imborrable en el alma del joven poeta, de la cual nunca pudo liberarse. De cierta manera, Cero en conducta es un intento por exorcizar los demonios que atemorizaron a Vigo durante su niñez. El filme es un canto al anarquismo infantil, y tuvo una gran influencia sobre la ópera prima de Truffaut, Los cuatrocientos golpes, una de las películas clave de la nouvelle vague. Considerada antipatriótica, la película estuvo prohibida en Francia hasta 1945.

             Mediometraje completo con subtítulos en inglés


Al año siguiente, en colaboración con Boris Kaufman, produjo su obra maestra, L'Atalante (1934).Tampoco fue bien acogida por la crítica ni por el público,  que Vigo no pudo ver acabada porque falleció de leucemia durante la etapa de edición. En la película se cuenta la historia de amor entre un joven marinero sin objetivos y su joven esposa. La acción transcurre en un pequeño carguero, donde la pareja recién casada se ve obligada a convivir con un viejo piloto, interpretado por Michel  Simon.Jean yJuliette contraen matrimonio y emprenden su viaje de bodas a bordo de L’Atalante, una barcaza de la cual Jean es capitán. Junto con el marinero Père Jules y un joven cabinero, la pareja navega por los canales cercanos al Sena. El largo viaje resulta aburrido para Juliette, quien ansía conocer la Ciudad Luz. Finalmente, Jean cumple el deseo de su joven esposa y la lleva a París. Allí la invita a un cabaret, en donde un vendedor ambulante coquetea con la joven. Celoso, Jean abandona a Juliette y zarpa dejándola sin un centavo. Sin embargo, la tristeza provocada por la separación será insoportable para los enamorados. L’Atalante es uno de esos filmes mágicos, cuya historia alrededor es tan apasionante y llena de contradicciones como la trama misma de la película. Filmada bajo condiciones climatológicas extremas, la cinta literalmente llevó a la tumba a su joven realizador, Jean Vigo, quien sucumbió víctima de una larga dolencia pulmonar tres semanas después de su estreno. Vigo no pudo conocer el resultado final de su trabajo pues la compañía productora reeditó el material mientras el cineasta agonizaba. La fría recepción que tuvo el filme en su estreno provocó que la Gaumont eliminara más escenas del filme, incluyera una canción popular en la banda sonora y le cambiara el título a Le Chaland qui Passe. Estos cambios hicieron que L’Atalante desapareciera casi para siempre. En los años 50, la revaloración de la breve pero importante obra cinematográfica de Vigo puso a L’Atalante de nueva cuenta en circulación. Sin embargo, las copias que supervivientes carecían de las escenas que dan al filme un tono casi surrealista. No fue sino hasta 1985 cuando se localizó en Londres una versión sin editar del negativo original. La reconstrucción se terminó en 1991 y así fue como, 57 años después, L’Atalante volvió a navegar, ésta vez siguiendo el rumbo marcado por su realizador. Se ha afirmado, con bastante justicia, que L’Atalante es la cinta que más se acerca a un sueño romántico. La extraña combinación de realismo y surrealismo de sus imágenes impregna al filme con un tono onírico que permanece en la mente del espectador tiempo después de terminada la proyección.



El director arriesgó su salud y su dinero en esta producción, que sufrió una serie de avatares similares a los que en su momento castigaron a Juana de Arco, de Dreyer. Entre 1934 y 1990, L'Atalante cambió de título, de música, de metraje y de escenas, a instancias de los productores, de los distribuidores y de la Cinemateca Francesa. Finalmente, el hallazgo de la primera versión en el Reino Unido, los archivos de la Frankilmdis, adquiridos por Gaumont, y una serie de entrevistas a parte de la plantilla que rodó la película, hicieron posible una versión más aproximada a la intención de Vigo.
Su legado combina el lirismo, el surrealismo, y una aproximación a la ideología anarquista. Aún conocedor de la gravedad de su naturaleza enfermiza, a su muerte, Vigo dejó más de una veintena de proyectos. Algunos con guión propio: Le métro, Lourdes; otros con guión ajeno: Le timide qui prend feu (Claude Aveline) y otros, adaptaciones de novelas: L'affaire peau de balle (George de la Fouchardière) o L'affaire Saint Fiacré (Georges Simenon). Cada año en Francia se concede el Premio Jean Vigo, que reconoce la independencia y la calidad.
Jean Vigo falleció en París de tuberculosis entrando en el Olimpo de los jóvenes mitos malogrados. Fue enterrado en el cementerio de Bagneux, en la capital francesa.


El estilo de Vigo, que bien puede calificarse como naturalismo poético, influyó decisivamente en directores de la talla de Jean Renoir y, más recientemente, Krzysztof Kieslowski. La fuerza expresiva y la naturalidad de sus imágenes hacen de L’Atalanteuno de los más bellos e inolvidables filmes sobre los misterios del corazón humano.


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